El té negro se utiliza para mejorar el estado de alerta mental, así como el aprendizaje, la memoria y la habilidad para procesar la información. El té negro está indicado especialmente para las primeras horas del día. Es ideal como desayuno y sustitutivo del café puesto que su efecto estimulante, aunque contiene menos cafeína que éste, permanece durante más tiempo en nuestro cuerpo.